EL POLVO DEL DESIERTO

El polvo del desierto

me invita a caminar

un trayecto ciego y hecho al azar.

La espuma de la mar

no alcanza a rozar

el esbozo de sonrisa

que suelo extrañar.

La hojas de otoño

cavilan al mirar

el camino pedregoso

que suelo transitar.

Quédate

no necesitas hablar

soy una roca

seca en el mar.

LA ROSA NEGRA

dELIrIUmLEtteRs

,

Las almas transitan en círculos,

como corderos perdidos entre la niebla.

El Muro es el calabozo del tiempo.

El Muro es nostalgia del viento.

Se abre la función,

proyección de egos traslúcidos,

circo de pobres espíritus,

tímido vaivén de trapecistas,

sumisos y perplejos,

no oyen más que ecos de miradas

rotas por El Espejo.

La tragedia, exultante ante La Estrella Nueva

baja para siempre el telón de miserias.

Ojos de cuervos serán, de los incrédulos, guirnaldas en pinos de noches espesas.

De la bastarda flor,

dagas atraviesan la inocencia de una niña que,

en la perla de una estrella,

halló la razón de su existencia.

De sus pétalos,

fundidas por un ardid del fuego,

falaces cadenas, sostienen de un péndulo,

la verdad de mares proféticos.

Sus hojas pudren la sabiduría del silencio.

Se abren las puertas del infierno,

el Sol, sin trono, sin fulgor, es de Hades ya,

la…

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Los abismos de la ceguera

Miras fijamente una piedra

esperando que se mueva.

Sueñas con conquistar el cielo.

Miras fijamente un árbol

esperando que dé frutos

Sueñas con conquistar el mundo.

Tus bolsillos llenos de promesas

La carretera en tu noche más profunda

Cuela tus sueños por una rendija de huesos

Entre tu ventana, el horizonte y la esperanza

Te tatúas un brazo

cambias de peinado

En tu mente engañan las palabras

En tu mente mienten los colores

Frente al inasible horizonte

tu mirada eclipsa

ante las verdades

de los abismos de la ceguera.